Collejas - Pozo Cañada

Reciente

Post Top Ad

Responsive Ads Here

Post Top Ad

Responsive Ads Here

domingo, 26 de marzo de 2023

Collejas


Llegaba la Semana Santa, y en casa nos preparábamos para realizar un viaje largo, dejando atrás el mar y las caracolas para adentrarnos en tierra de Molinos y Gigantes. Un ritual que año tras año se repetía. La noche anterior apenas dormía, imaginando el reencuentro con ese paisaje que tanto me fascinaba.
Llegábamos al pueblo, las chaquetillas de lana se agradecían, la casa estaba fría, esperándonos desde el verano. Mientras mi padre preparaba los ceporros y sarmientos para encender la chimenea, mi madre colocaba las viandas que habíamos traído del viaje. Yo, exultante, corría por el campo próximo a casa…Mis pasos se perdían entre la cebada, avistando alguna amapola que me hacía un guiño, y alguna mariposa temprana que revoloteaba campo a través. De nuevo, me encontraba en el paraíso perdido de mi memoria.
Reencuentros que año tras año, se sucedían en aquel entorno que tan lejano me quedaba. Atenta, escuchaba a los mayores, relatando vicisitudes y recuerdos; nunca imaginé que aquellos momentos harían tanta mella en mi persona. Manera distinta de hablar, de ver, de observar. La Mancha añorada…
Las tardes de bueno, nos adentrábamos en la búsqueda de “collejas”. Nos pasábamos la tarde por los sembrados, por terrenos de poca labor, por las lindes…De vez en cuando, mi padre alborozado decía, “mira, aquí están, las collejas, habré comido yo pocas en mis tiempos de niñez y juventud”, yo rauda, corría hacía él, y con suma delicadeza las miraba y tocaba, “¡si son hierbas¡”, pensaba yo, mientras veía cómo los mayores hacían buen acopio de ellas. Seguíamos caminando por aquellos paisajes que tanto recuerdo, con sonidos de pajarillos, presencia de alguna mantis religiosa, y mariquitas asomándose entre las flores…Estampas de ensueño, donde mirar al infinito producía una sensación de bienestar, donde el tiempo parecía detenido, donde la emoción me embelesaba.
De vuelta a casa, y entonces mamá preparaba aquellas tortillas de collejas, y todos, avíados de un buen chusco de pan, nos metíamos en faena, degustando aquellas collejas que tantos recuerdos producían a los mayores...Semana Santa, recuerdos y collejas…
Texto: Rosa Delgado.










FUENTE: https://www.facebook.com/photo?fbid=587978103356941&set=a.550022770485808

LA ALACENA DE DON QUIXOTE

Fotografía: LA ALACENA DE DON QUIXOTE.

























 



©Pedro Pablo Romero Soriano PS

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Post Top Ad

Responsive Ads Here